El repentino cierre de La Nene hizo que cambie el título de la nota, pero no por ello esto se va a alejar del tema original porque otros asuntos como el Transpacífico (TPP/TPPA) y la pésima situación de internet en el perú guardan relación con estas lacras que extorsionan a las chicas.

Las zancadillas a la formalidad.

¿Qué guardan en común el comercio electrónico, la prostitución y la propiedad intelectual en el perú? Como hablé de esto antes, la haré más corta: Las arbitrariedades que atentan contra su uso, sobre todo el formal.

La prostitución en el perú es legal, pero las plazas para ejercer el oficio muchas veces no se pueden obtener (de ahí que Las Cucardas y La Nene pasaron a ser clubes nocturnos, siguen siendo plaza para ellas de esa forma). Como resultado, el hecho que "no tengan licencia de funcionamiento" para ese fin es porque las autoridades no quieren ofrecer esa opción y como resultado, esa situación se vuelve caldo de cultivo para la extorsión.

Réplicas al caso: El MINCETUR y el #TPP.

El cafichismo es la norma y el primer ejemplo al respecto es el TPP. Mantener en el limbo las excepciones al uso de contenidos con derecho de autor como pretende el MINCETUR en ese caso, hace que el uso de estos aun cuando las convenciones internacionales lo permiten terminen siendo perseguidos (de esa forma sacan la vuelta a la convención de Berna, relacionada al caso). En perú tenemos casos como el de gerardolipe, que únicamente por disgusto de un canal desapareció un archivo que hasta sus propios periodistas pitearon por esa acción.

Desafortunadamente, esa tendencia se hizo nuevamente patente tras la filtración del borrador del acuerdo por parte de Wikileaks. Pero en lugar de dar explicaciones o reglas claras, las autoridades no solo dan al traste con esa luz verde a la arbitrariedad, se portan como cafichos botando a las bataclanas que una vez trabajaron para ellos. 

Ahora (aunque algo tarde) hay un llamado para que no se acepte el tratado, viendo que en otros lares hay conflictos al respecto (incluso en EUA, donde negaron a Obama dar privilegios para aprobarlo)

Segunda réplica: #IntervenganAPDAYC

El caso APDAYC tiene mucho más de caficho, con leyes que permiten de forma arbitraria que las sociedades de gestión te cobren primero y luego pregunten si eres o no miembro de la entidad. Es decir, una agresión a la propiedad intelectual permitida por la ley del derecho de autor (DL. 822)

Lo peor de todo es la relación de quienes supuestamente deberían fiscalizarlos con ellos. Y en lugar de jalar de las orejas a INDECOPI por el caso, lo premian mandándolo de vacaciones con la condición de eructar lo mismo que el MINCETUR sobre el TPP. Y sabemos que INDECOPI es caserito de la embajada estadounidense.

Tercera réplica: los bancos.

- El comercio electrónico también guarda relación con los proxenetas: corralitos bancarios (cosa vista hasta en el fiasco del CybermondayPE), comisiones fantasma y hasta bloqueos de pagos (a la Wikileaks). 

Como resultado, el uso formal del comercio electrónico es más inhibido por los propios bancos que por los delitos informáticos (a quién diablos van a robar si nadie compra), se hacen adiciones que resultan no tener peso alguno en la práctica y lo peor de todo (com en los casos anteriores) se criminalizan ciertas acciones para beneficio de quienes no les gusta que demuestren sus fallos (aun si estos atentan contra sus clientes/ciudadanos).

La marcha de l@s put@s.

Estamos siendo gobernados por proxenetas y dejamos que hagan y deshagan a su antojo. Si tanto se cacareaba por defenderse de esas agresiones cuando llegaban a la mujer (y a los travestis/transgéneros), ¿Por Qué aguantar los mismos golpes en otros ámbitos?